jueves, 26 de febrero de 2009

Corre, corre, que te pillo...

Argelia cerró la frontera con Marruecos en 1994, desde entonces permanece cerrada y la relación entre ambos países no ha avanzado, sus problemas territoriales no dejan pensar en un futuro mejor.

Las poblaciones fronterizas, en la parte marroquí, se han montado su sistema de subsistencia con el contrabando. En concreto el del gasoil es especialmente favorable y mucha gente de esta región pobre del este del país pueden sobrevivir gracias a este negocio.

Toda la frontera está plagada de caminos por los que discurren coches y motos sin matrícula, van y vuelven cargados como pueden y evitando ser vistos por la policía o los militares. No por nada, sino por que así el viaje les sale "más barato".

miércoles, 18 de febrero de 2009

Vaya con los parados...


El gobierno marroquí se comprometió con los diplomados en paro a darles empleo público hace ya mucho tiempo. Ellas y ellos van manifestándose casi a diario en el centro de Rabat, la policía les calienta porque son manfestaciones no autorizadas y poco a poco algunos consiguen un contrato.


No ha sido la primera vez y supongo que no será la última, esta semana unos 200 de esos jóvenes tomaron la sede del Partido Istiqlal, liderado por el Primer Ministro Abás el Fasi, y se encerraron allí unas 11 horas hasta que las negociaciones dieron su fruto... o al menos las promesas les sonaron algo más reales, quien sabe!


Los anti-disturbios se plantaron delante del edificio y hasta llegaron dos camiones con cañones de agua a presión, pero al final la cosa acabó pacíficamente. No me imagino a 200 parados en Madrid tomando la sede del PSOE exigiendo puestos de trabajo, en los tiempos que corren quizás vamos a ver más medidas de presión desesperadas como la que protagonizó este grupo marroquí en otros países declarados más avanzados.

jueves, 12 de febrero de 2009

¡Se acabó el chollo!

"Me bajo al moro, arriendo un campo tirado de precio, pago siete veces menos a los jornaleros y me pongo las botas haciendo dinero..."

Pues no señor, ¡se acabó el chollo! Los agricultores españoles que se instalaron en Marruecos, concretamente en la zona de Agadir, descubren hoy en día que los sindicatos les están ganando la batalla, la de las condiciones de trabajo, y que el negocio se les acaba por momentos...

Evidentemente aquí van a perder todos, los que han invertido por un lado y los trabajadores marroquíes por el otro al perder miles de puestos de trabajo en un momento y en un lugar que no están precisamente para ninguna alegría.